De niño con pronostico reservado.
Por mi abuelo, por mi estrella y por mi.
Una visión que nunca soltó el timón.
Oportunidades que no escaparon.
Un acorazado lleno de historias insólitas, incluso utópicas.
Lugares inhóspitos y huracanes inesperados.
Presiones, personas, litigios y problemas.
Similares pero no sinónimos.
Similares pero no sinónimos.
Brindis que celebran conquistas.
Potentes secuelas que se pagan con placer.
Potentes secuelas que se pagan con placer.
Al riesgo, a la entrega y al corazón.
Al no renunciar a la intuición.
A la constancia, al creer, sin saber y sin huir.
Sin confundir que ahora, ahora,
mas que nunca... hay que seguir.
mas que nunca... hay que seguir.
"Veni, vidi, vici"